¿No tienes plan para este fin de semana? No te preocupes. Cuando te levantes y acabes de desayunar tu café con leche y las pertinentes tostadas, sal a dar una vuelta con tu amor… de cuatro ruedas. Seguro que tienes tu carretera preferida para pasearte hasta la hora del vermú. Si ya eres de los que ha incorporado esta rutina a sus fines de semana te interesará este artículo. ¿Por qué? Ni más ni menos porqué te explicaremos cómo disfrutar de la conducción a un nivel superior. ¿Cómo? Pues corriendo en las mismas pistas por las que los Mercedes de F-1 se han paseado este año o en otras pistas en las que las grandes marcas prueban sus novedades.

La opción ideal sería alquilar un circuito para ti y para que pudieras sacar todo el partido a tu Mercedes con toda la pista a tu disposición. De momento descartaremos esta opción, más que nada por el precio. Alquilar el Circuit de Catalunya toda una mañana te costaría un riñón y parte del otro. En euros, no menos de 21.000. La mejor opción para tener una primera experiencia con las pistas de competición sin gastarte demasiado dinero, entre 60 y 120 por coche, es apuntarte a correr algunas tandas con tu propio vehículo que se organizan en los circuitos catalanes de Montmeló, Castellolí, Calafat o Alcarràs.

Correr en tandas en un circuito es una forma inmejorable de quemar gasolina y adrenalina con total seguridad. Uno de los atractivos de esta experiencia es que, por un precio más que asequible, podrás vivir la misma atmósfera que se vive habitualmente en un día de gran premio. Eso sí, sin Lewis Hamilton haciéndote sombra en la pista. El precio de las tandas incluye un seguro especial y el cronometraje de las vueltas que des al circuito. El combustible y el desgaste, que lo tendrás, de tus neumáticos, corren de tu cuenta. Si llevas a tu grupo de amigos para que te animen, no te preocupes, la entrada es gratuita.

Hay varias tipos de sesiones de tandas. Normalmente suelen ser de 30 minutos pero también existe la opción, más cara, de disponer de la pista durante más tiempo para que entres y salgas de ella cuando quieras sin la presión de estar limitado a la tanda determinada que tengas asignada. Si ya te hemos enamorado y estás pensando en apuntarte a una tanda recuerda que, dado que vas a someter el coche a un uso intensivo y exigente, lo mejor es tenerlo en buena forma. Vigila especialmente los neumáticos, embrague, caja de cambios y frenos. Con el coche en forma, ¿dónde nos vamos a correr? Si tu coche va sobrado de potencia, encamínate a Montmeló. Si prefieres ponerte a prueba a ti y no tanto a tu máquina, un circuito mediano como los de Castellolí o Calafat se ajustará mejor a tus expectativas.

En estas tandas de circuito basta con llevar un casco de coche o de moto homologado y no es necesario que tu coche tengas ni barras ni arneses. Una vez en la pista no te pongas al 110% en la primera recta. Deja que tu coche se caliente de forma adecuada y, sobre todo, ten cabeza. Aunque en el circuito tengas escapatorias para salir bien parado de una curva mal tomada, una voltereta con el coche o una colisión con otro vehículo puede acabar en algo más que un susto. Recuerda que has venido a pasar un buen rato, no a convertirte en campeón del mundo de la noche a la mañana. Por otro lado, en caso de accidente, te cubrirá el seguro que hayas contratado y los circuitos siempre cuentan con medidas de seguridad y servicio médico propios.

Esperamos que este artículo os haya despertado el gusanillo de la competición. Eso sí, para quemar adrenalina al volante, lo mejor es hacerlo en un espacio controlado con un circuito. Os ahorrareis más de un disgusto con los Mossos.

STERN MOTOR TE RECUERDA…

• Correr en tandas en un circuito es una forma inmejorable de quemar gasolina y adrenalina con total seguridad.
• Si ya te hemos enamorado y estás pensando en apuntarte a una tanda recuerda que, dado que vas a someter el coche a un uso intensivo y exigente, lo mejor es tenerlo en buena forma.
• Deja que tu coche se caliente de forma adecuada y, sobre todo, ten cabeza. Recuerda que has venido a pasar un buen rato, no a convertirte en campeón del mundo de la noche a la mañana.