La marca smart ha sido pionera en servicios de coche compartido y espera serlo en el futuro cuando llegue la conducción autónoma con el smart vision EQ fortwo. Razones no le faltan. Si ya ahora el car-sharing se está convirtiendo en una necesidad en las ciudades, cuando, además, los coches sean autónomos y no tengamos ni que conducirlos el éxito del car-sharing estará más que asegurado. Y aquí es donde entrará en juego el vision EQ fortwo, un prototipo que muestra una nueva visión de la movilidad urbana futura, personalizada, flexible y extremadamente eficiente.
La propuesta de smart con este prototipo de conducción autónoma es la de recoger a sus pasajeros directamente en el lugar deseado. Así, el smart vision EQ fortwo podrá llamarse mediante un dispositivo móvil. El usuario reconocerá que se trata del “su” vehículo con ayuda de nuevas opciones de personalización como un panel frontal, que mostrará si el vehículo está ocupado por una o por dos personas, y superficies de proyección laterales de gran tamaño. Cuando el vehículo no esté ocupado emitirá información sobre acontecimientos locales, el tiempo, noticias o la hora.
El vehículo también estará capacitado para contactar con otros usuarios interesados con la ayuda de la función 1+1, que permite compartir el viaje. Los posibles pasajeros se propondrán, a partir de sus perfiles previamente definidos y el destino deseado en este momento, y podrán aceptar o rechazar hacer uso del coche. En los trayectos compartidos, el visualizador mostrará los intereses comunes. De este modo, el tiempo libre del cual se puede disfrutar gracias a los vehículos de conducción autónoma puede aprovecharse para el intercambio y la interacción entre los ocupantes.
El smart vision EQ fortwo abre una nueva era del car-sharing. Los usuarios no tendrán que buscar un vehículo libre: el vehículo es el que los encontrará y los recogerá en el lugar deseado. Y gracias a la inteligencia colectiva y a las previsiones de demanda, se encontrará con toda probabilidad en las proximidades. Se eliminará, así, el trayecto para llegar hasta el “vehículo alquilado”. Los vehículos interconectados entre si estarán siempre en marcha. Así aumentará su grado de aprovechamiento y se reducirán al mismo tiempo el volumen de tráfico y las zonas de aparcamiento en el entorno urbano.
Para hacer realidad todas estas prestaciones, el smart vision EQ fortwo dispondrá de una batería de iones de litio con una capacidad de 30 kWh. Cuando no esté ocupado, se dirigirá de forma autónoma a un punto de carga para recargar energía. Alternativamente, los vehículos pueden acoplarse en la red eléctrica mediante inducción, entregar energía eléctrica y descargar con un “sistema de baterías en enjambre”.
Estéticamente, el smart vision EQ fortwo es un bonito dos plazas y destaca como todos los smart para ofrecer la máxima amplitud con el mínimo espacio. El exterior presenta las proporciones típicas de smart, los marcados y contundentes pasa-ruedas, los voladizos cortos del frontal y la saga. Un elemento que llama la atención es el innovador concepto de puertas. Las dos giran por encima del eje posterior en forma de alas, lo cual permite ahorrar espacio, facilita el acceso y crea una imagen fascinante. Este concepto de puertas reducirá al mismo tiempo el riesgo de colisión con ciclistas o peatones.
Este prototipo es el primer vehículo del grupo Daimler a renunciar de forma consecuente al volante y a los pedales. Así, el control de las funciones del vehículo se realizará a través del mismo dispositivo móvil o mediante la entrada de voz de manera intuitiva. En el interior , la renuncia a los mandos convencionales permite que el habitáculo sea todavía más espacioso. En lugar de un tablero de instrumentos, habrá una pantalla de 24 pulgadas (58,5 x 15,6 cm). En los laterales se encontrarán dos pequeños visualizadores (cuatro pulgadas), donde lo smart vision EQ fortwo podrá proyectar diferentes mensajes e informaciones.
Finalmente, el vehículo se adaptará a cada cliente mediante colores y pantallas, brindándole un espacio privado para disfrutar de los desplazamientos por la ciudad. Con esto, el usuario tendrá la posibilidad de personalizar el vehículo según sus necesidades personales. Un paso más, y quizás definitivo, hacia el coche del futuro.
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La marca smart ha sido pionera en servicios de coche compartido y espera serlo en el futuro cuando llegue la conducción autónoma con el smart vision EQ fortwo
