Este mes, descubrimos la preciosa Val D’Aran a través de todos sus rincones mágicos. La intensa naturaleza del valle y los bellos tramos fluviales o lagos nos acompañarán a lo largo de toda nuestra ruta. Ésta es una propuesta marcada por la belleza del paisaje, ideal para realizar durante esta época del año debido a los tonos que nos ofrece la naturaleza, desde los bosques hasta los picos nevados, que forman un paisaje idílico para nuestra escapada. Cada estación del año tiene su encanto en el valle y se pueden observar especies de flora y fauna distintas. En la temprana primavera descubriremos la presencia de numerosos mamíferos a través de sus huellas en las últimas nieves.
La Val d’Aran ofrece características muy distintas del resto de valles del Pirineo que pertenecen a la vertiente mediterránea. La Val d’Aran se extiende por la vertiente Atlántica, con una extensión que comprende la zona del Garona y parte de las cabeceras de la Noguera Pallaresa y de la Noguera Ribagorçana. El Garona es alimentado por ríos de largas riberas y barrancos a lo largo del Valle. El curso del río Garona vertebra el valle principal y sus afluentes aportan no solo sus aguas sino también otros valles laterales que justifican el nombre con el que se ha denominado este bello rincón del Pirineo: Val d’Aran (valle de valles).
Partiremos desde el pueblo de Bausen, junto a la frontera francesa, para ir bajando el valle mientras recorremos cada rincón mágico. Este pueblo está situado a 945 metros de altura y nos ofrece una maravillosa vista panorámica del Bajo Aran. Una vez tomadas las fotos pertinentes, ponemos rumbo a Bossost, donde proponemos realizar nuestra primera parada para desayunar como reyes. Os aconsejamos que visitéis la Tauèrna Urtau que cuenta con una gran oferta de pinchos y una amplia carta. Además ofrece desayunos y bocadillos. Todo esto en un enclave privilegiado de la población, justo delante de la iglesia, donde mientras se come tranquilamente en la terraza se puede disfrutar de una plaza sin tránsito y con unas espectaculares vistas.
Con la barriga llena de pinchos volvemos al coche para, de nuevo, coger la carretera de Lleida-Vielha, y dirigirnos hacia Arrós. Cogemos el cruce hacia la izquierda para adentrarnos en el este precioso pueblecito. Pasado el pueblo, unos metros más adelante, tomamos el desvío a la derecha, que ya indica el camino hacia la preciosa cascada de Sauth deth Pish. A 20 minutos por una carretera forestal bien preparada, con unas vistas y unos caballos de postal, llegaremos al parking de Sauth deth Pish, donde podemos dejar el coche (GPS: 42.776562 , 0.832547). En 5 minutos andando estaremos delante de la cascada. Veremos que por la derecha sube un camino, que gira a la izquierda hacia la cascada, un poco mas empinado, y que en 10 minutos nos llevará a la parte de arriba de la cascada. Aunque el último paso es un poco más escabroso, éste es uno de los rincones más mágicos y tranquilos de la Val d’Aran.
Después de ver tal maravilla de cascada, toca dar media vuelta y seguir la ruta. Cogeremos de nuevo la carretera de Lleida-Vielha en dirección a Vielha, la cruzamos y seguimos subiendo en dirección a Baqueira, atravesando varios pueblos. Una vez en Baqueira, pasamos la primera rotonda y a unos 100m encontramos a nuestra izquierda el Escornacrabes, un restaurante que ofrece un gran surtido de hamburguesas, bocadillos, crêpes dulces y salados y ensaladas, todo de elaboración propia. Recomendamos coger algún plato para llevar que luego comeremos a modo picnic en el pueblo abandonado de Montgarri.
Con los bocadillos a punto, volvemos a la carretera y tomamos el primer desvío que encontramos hacía la izquierda, dirección a Beret. Nos encontraremos con una carretera de curvas que nos irá subiendo hacia Beret y de allí a Montgarri. Montgarri es un pequeño pueblo de montaña actualmente casi despoblado del municipio Naut Aran. En 2009 sólo tenía 4 habitantes censados (todos ellos, varones). Hoy en día aún perduran las casas (llamadas bordas), en avanzado estado de ruina, de los últimos habitantes de la zona. Éstos se vieron obligados a abandonar el pueblo durante los años sesenta debido a las duras condiciones de vida, con fuertes nevadas durante el invierno, ya que se encuentra a una altitud de 1.645 metros. Al llegar allí, solo queda sacar los bocadillos, ponernos cómodos y disfrutar de una increíble comida en un lugar único. No podemos olvidarnos de la debida siesta que aconsejamos hacer antes de volver a subir al coche para realizar el camino de vuelta a casa.
Nombre: “Los secretos de la Val d’Aran”
Área Geográfica: Valle de Aran / Lleida
Duración: 1 día
Kms: 390