Lo creas o no, buena parte de las averías que sufre tu coche obedecen a tus propios errores y, consecuentemente, no están cubiertas por la mayoría de los seguros. Estos despistes pueden hacer que tu coche acaba en el taller y que tengas que realizar un gasto que, en ocasiones, puede ser muy elevado. Para que te hagas una idea, el 13% de las visitas al taller se podrían evitar si todos los conductores pusiéramos más atención y mimáramos más nuestros vehículos. A continuación, te explicamos cuáles son las averías más comunes que puedes provocar y cómo evitarlas.
Repostaje incorrecto
El error más común entre los conductores españoles (26%). Al menos eso es lo que asegura una encuesta del RACE, que cifra en 50.000 anuales las equivocaciones a la hora de repostar carburante. Un fallo que suele producirse cuando el conductor tiene dos vehículos o utiliza un vehículo de empresa o alquiler con el que no está familiarizado. Seguro que te fijarás más a la hora de repostar cuando sepas que la limpieza del depósito, los conductos y filtros no te costará menos de 400 euros.
Ignorar los testigos
Las luces del salpicadero no se encienden porque sí. Cuando veas una de estas lucecitas no la ignores. Hacerlo es el causante del 20% de las visitas al taller. Si todavía no lo has hecho, repasa el libro de instrucciones de tu coche, apréndete que significa cada testigo luminoso y, si alguna vez se te enciende alguna, toma nota y acude lo más rápidamente posible a tu taller de confianza. En este caso, la dejadez puede salirte muy cara.
Mantenimiento deficiente
Asegura el RACE que el porcentaje de visitas al taller que se producen porque el conductor no ha hecho un correcto mantenimiento de su coche es de un 16%. Y, es más, otro estudio asegura que el 55% de los conductores no pasa las revisiones recomendadas por el fabricante alegando, principalmente, que los mantenimientos periódicos son muy caros. Nada más lejos de la realidad. Una avería causada por un mantenimiento deficiente te saldrá mucho más cara que cualquier revisión.
Conducción inadecuada
Los acelerones, frenazos, apurar las marchas más de lo debido son factores que también afectan a la vida del motor y mucho. No en vano son los culpables del 13% de las visitas al taller. Si mejoras tu forma de conducir no sólo garantizarás una mayor esperanza de vida de tu vehículo, sino que también ahorrarás tanto en reparaciones de averías como en desgaste de neumáticos y consumo de combustible. Para empezar, comienza por habitar algunos malos hábitos que dañan tu coche: no dejes el pie en el embargue durante los semáforos ni la mano sobre la palanca de cambios mientras conduces; reduce la velocidad al pasar un bache o un badén y evitar subirte a los bordillos para aparcar.
Pérdida de llaves
Cuando acabes de leer este post, comprueba que conservas las dos llaves de tu coche. Si perdieras una y no tuvieras repuesto el remedio te puede salir muy, muy caro. Este olvido conlleva la sustitución de los llavines, del sistema de contacto y de las llaves con radiofrecuencia. O sea que ya sabes, busca una respuesta para la siguiente pregunta: ¿Dónde están las llaves?
MOVENTO TE RECUERDA…
Buena parte de las averías que sufre tu coche obedecen a tus propios errores y, consecuentemente, no están cubiertas por la mayoría de los seguros. Te explicamos cuáles son las averías más comunes que puedes provocar y cómo evitarlas.