La conducción eficiente es buena para quien está al volante, para quienes le acompañan y también para el planeta. Por eso aquí no nos cansaremos de hablaros de ella, porque no queremos que os quede ninguna excusa para no ponerla en práctica. En este post, os contamos susbeneficios y una buena herramienta para los compradores con conciencia: el etiquetado energético.
8 beneficios de la conducción eficiente:
• Nos ahorramos de media un 15 por ciento de carburante
• Mejoramos el medio ambiente
• Reducimos en un 15 por ciento las emisiones de CO2 a la atmósfera
• Disminuimos la contaminación acústica
• Aumentamos el confort en el vehículo
• Reducimos nuestro estrés como conductores
• Ahorramos en costes de mantenimiento del vehículo: sistema de frenado, embrague, caja de cambios y motor, etc.
Más allá de lo que podemos hacer cuando estamos al volante para cuidar del medio ambiente y ahorrar, hay una decisión fundamental que como conductores podemos tomar con la mirada puesta en el planeta: la compra del automóvil. En este sentido, disponemos de una herramienta muy útil para consumir responsablemente, que es la etiqueta energética. Tal y como se establece por ley cualquier turismo nuevo debe incorporar una etiqueta con los datos oficiales de consumo de combustible y emisiones de CO2.
Comparar antes de comprar
Además, el Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDEA) ha elaborado una base de datos en la que podemos obtener información detallada y comparativa sobre el consumo de carburante y las características de los coches nuevos puestos a la venta en España. Hay que tener en cuenta que un vehículo adquirido con criterios de eficiencia energética puede ahorrar hasta un 50% de las emisiones de CO2 con respecto a un coche menos eficiente y reducir de forma equivalente nuestro gasto en carburante.
Si queda alguien reticente a dar el paso hacia la conducción eficiente, seguro que en nuestro próximo post sobre este tema le convenceremos. Nosotros, al menos, seguiremos intentándolo.
