Viajar por el mundo y sentirte siempre como en casa. Detenerte en los rincones más especiales y disfrutar de cada momento sin tener que preocuparte de buscar alojamiento… De esto trata la experiencia de moverse en autocaravana, una combinación de vivienda y medio de transporte que cada vez cautiva además viajeros en nuestro país.
La crisis económica y la atracción creciente que despiertan el contacto directo con la naturaleza y un estilo de turismo más libre probablemente se encuentren detrás del aumento en el número de autocaravanistas en España, cuyo parque móvil se sitúa ya en las 35.000 unidades , según la European Caravan Federation. Aún así no se alcanzan los niveles de otros países europeos, como Alemania, Francia o Reino Unido, los líderes del autocaravaning . El cambio en nuestro país, además, no es sólo cuantitativo, también está evolucionando el perfil de los viajeros . Si antes se trataba sobre todo de personas mayores de 50 años, ahora son cada vez más las parejas jóvenes con niños las que se suman a esta forma de turismo.
Los pequeños son los que más suelen disfrutar de este tipo de viajes. La idea de salir con la casa a hombros les encanta y suelen entusiasmarse ya desde el momento de los preparativos de la salida. El sentimiento de aventura y juego está para ellos más asociado a los viajes en autocaravana que a unas vacaciones en un hotel.
Seguridad y comodidad
La conducción de la autocaravana es parecida a la de cualquier furgoneta diésel, aunque debe tenerse más cuidado cuando el viento es fuerte debido a la menor relación entre volumen y peso. Por lo general, manejar en carretera uno de estos vehículos es cómodo y seguro y no comporta los inconvenientes que las autocaravanas antiguas podían implicar. Las dimensiones habituales están entre los seis y siete metros de longitud , con unos tres metros de altura, mientras que el peso máximo alcanza los 3.500 kg . Su consumo se sitúa entre los 11 y 15 litros por cada 100 kilómetros.
Volkswagen Camper
Existen varios tipos de caravana, según su ensamblaje con la cabina de base, que es lo que le confiere su perfil exterior. La capuccina , la más popular, se caracteriza por tener una estancia con una gran cama sobre la cabina del conductor y son ideales para viajar hasta 7 personas . Las profilée son parecidas, pero el espacio sobre la cabina se reduce para convertirse en un armario, consiguiendo un perfil más aerodinámico. En ellas pueden dormir máximo 4 personas . Las más espectaculares son las integrales, que amplían el habitáculo sobre la cabina e incorporan el espacio de conducción en la sala de estar gracias a los asientos giratorios. Las más míticas, sin embargo, son las cámper , furgonetas de serie adaptadas para una nueva funcionalidad. Pese a sus reducidas dimensiones, los techos sobrelevados y elevables permiten pernoctar a cuatro personas.
Practicar el turismo en autocaravana no es caro, pero sí requiere una buena inversión inicial. Así, una nueva caravana puede costarnos más de 26.000 euros, mientras que una de segunda mano la podríamos conseguir a partir de 6.500. Sin embargo, para quienes viajen a menudo y, sobre todo, para familias, el ahorro posterior en alojamiento, comidas, etc. compensa. Y más allá de las consideraciones económicas, ¿acaso tiene precio poder contemplar un amanecer en una recóndita playa desierta?